(Prensa Alcaldía de Puerto Cabello).- En un ambiente de fe, devoción y esperanza la población de Borburata en Puerto Cabello, conmemoró los 350 años de la peregrinación y llegada del Santo Cristo de la Salud a la población, para lo cual se realizó una eucaristía, con el apoyo de la gestión municipal que lidera el alcalde Juan Carlos Betancourt.
La misa fue presidida por Monseñor Saúl Figueroa Albornoz, Obispo de la Diócesis de Puerto Cabello, acompañado por el padre José Inés Aquino, párroco de Borburata y demás sacerdotes de la ciudad porteña, quienes elevaron oraciones y plegarias al Santo Cristo por el cese de la pandemia Covid-19 que ha cambiado el curso de la vida a nivel mundial.
“ Son momentos difíciles, tiempos en los que debemos cuidarnos unos a los otros, como hermanos, proteger a la familia y no abandonar a los enfermos, la pandemia no solo afectó a nuestro país sino al mundo entero, por tanto, debemos tener fe en Dios de que por su misericordia todo lo malo va a pasar” expresó el Monseñor.
Asimismo, aprovechó para invitar e incentivar a la población a que acudan progresivamente a vacunarse, sin temor y como método de salvación, “no crean en falsos rumores, se ha demostrado que todas las vacunas aprobadas por la Organización Mundial de la Salud OMS son efectivas, unas tal vez más que otras, pero debemos vacunarnos todos” dijo.
La autoridad eclesiástica municipal, destacó que se mantendrá en oración por la salud de la población y por aquellos que luchan para vencer el coronavirus, reiteró el llamado a mantener la calma y le fe en Dios, en oración permanente por la iglesia y las familias.
Por su parte, el padre José Inés Aquino, agradeció a todas aquellas personas que de alguna manera mostraron su generosidad para el desarrollo de la festividad que inicio el pasado 4 de septiembre, ayudaron con el arreglo del templo y realizaron donativos especiales para las flores y ofrendas.
La Primera Combatiente del municipio María Daniela de Betancourt, quien asistió a la homilía y compartió con los feligreses, expresó su satisfacción al poder contribuir con que la fe católica prevalezca aun en tiempos de dificultad, “un Cristo de la Salud resucitado, símbolo de vida que nos brinda la protección que la humanidad y el pueblo en general se merece”.
Fe y devoción el Santo Cristo
Es importante destacar, que como cada año cientos de creyentes y devotos, propios y foráneos, acudieron al pueblo de Borburata a ofrendar y agradecer al santo Cristo de la Salud por favores concebidos, desde niños hasta adultos mayores, todos unidos con un solo mensaje la fe de que cristo vive y los ayuda a vencer sus dificultades.
Robertina Montiel de González, devota y quien estuvo a cargo de la celebración por más de 20 años, envió un mensaje a la colectividad a que se acerquen a Cristo el único que les dará la fortaleza para sobrevivir y el más grande amor que les regalará los frutos especialmente en la salud.